Brasil es un país que encanta a todo el mundo por sus playas, la buena onda de su gente, su cultura vibrante y su naturaleza exuberante, pero también es un destino excepcional para los amantes del buceo.
Con una costa muy extensa y un sinfín de ecosistemas marinos, este país ofrece algunos de los mejores puntos de inmersión del mundo.
FERNANDO DE NORONHA: LA JOYA DEL ATLÁNTICO
Ubicado a 350 kilómetros de la costa noreste de Brasil, el archipiélago de Fernando de Noronha es un verdadero paraíso para los buceadores. Este destino es famoso por sus aguas cristalinas, con una visibilidad que puede superar los 40 metros.
Sus arrecifes, cuevas y acantilados submarinos albergan una gran diversidad de vida marina, incluyendo tortugas marinas, delfines, tiburones y rayas.
Uno de los sitios más destacados para el buceo es la Caverna da Sapata, una cueva submarina con fascinantes formaciones rocosas y abundante fauna marina.
Importante tomar en cuenta que solo un número limitado de visitantes puede ingresar a Fernando de Noronha diariamente para preservar su ecosistema, lo que hace que la experiencia de buceo sea aún más exclusiva y especial.
ABROLHOS: SANTUARIO DE CORALES Y BALLENAS
Abrolhos, en el estado de Bahía, es el hogar de la mayor biodiversidad de arrecifes de corales del Atlántico Sur. Una auténtica joya en Brasil.
Su nombre proviene de la advertencia de los navegantes portugueses que decían “abre os olhos” (abre los ojos) debido a los peligros que representaban los arrecifes para los barcos.
Entre los meses de julio y noviembre, es posible avistar ballenas jorobadas, que migran a estas aguas para reproducirse. Y hablando de Brasil, ¿te has preguntado si vale la pena subir al Cristo Redentor? Aquí te lo contamos.
ILHA GRANDE: NAUFRAGIOS Y BIODIVERSIDAD
Situada en la costa de Río de Janeiro, Ilha Grande es un destino fascinante tanto para principiantes como para buzos experimentados. La isla cuenta con arrecifes, cavernas y barcos hundidos, que la convierte en un lugar atractivo para explorar.
Uno de los naufragios más famosos es el Pinguino, un antiguo barco petrolero hundido en la década de 1960, que hoy es un refugio para diversas especies marinas.
Ilha Grande es una de las pocas zonas de Brasil donde la Mata Atlántica sigue prácticamente intacta, ofreciendo no solo un excelente buceo, sino también oportunidades para realizar senderismo.
MARAGOGI: EL CARIBE BRASILEÑO
Maragogi, en el estado de Alagoas, es conocido por sus piscinas naturales formadas por arrecifes de coral en medio del océano. Este destino es ideal para quienes buscan buceo relajado en aguas poco profundas y cristalinas.
Gracias a su biodiversidad, es posible observar desde pequeños caballitos de mar hasta bancos de peces multicolores.
Este paraíso en Brasil forma parte de la Costa de los Corales, la segunda barrera de coral más grande del mundo después de la Gran Barrera de Coral australiana.
FLORIANÓPOLIS: BUCEO EN EL SUR DE BRASIL
Florianópolis ofrece excelentes inmersiones, especialmente en la Isla do Arvoredo, que es parte de una reserva biológica protegida, lo que garantiza que la vida marina permanezca abundante y en óptimas condiciones para la exploración. ¡Con tu membresía Royal Holiday puedes hoapedarte en Jurere Beach!
Como siempre, conviene informarse acerca de la mejor época para ir a cualquiera de estos destinos, si se requieren permisos o licencias y lugares oficiales para alquilar equipos y contratar guías.